qué es el lavado de dinero y qué son las directivas aml

Qué es el lavado de dinero (AML) y cómo prevenirlo

March 26, 2024

Key takeaways

 

1. Comprender AML y KYC: Entender los fundamentos de las prácticas Anti-Lavado de Dinero (AML) y Conoce a Tu Cliente (KYC) es esencial para que las empresas combatan el fraude financiero y mantengan el cumplimiento con los estándares regulatorios globales.

2. El Impacto del Lavado de Dinero: El lavado de dinero es un problema global que socava la estabilidad económica, alimenta el crimen organizado y representa riesgos significativos para el sector financiero, con un estimado de entre 800 mil millones y 2 billones de dólares lavados anualmente.

3. Etapas del Lavado de Dinero: Reconocer las tres etapas del lavado de dinero—colocación, estratificación e integración—permite a las instituciones financieras detectar y prevenir la integración de fondos ilícitos en la economía legítima.

4. Verificación de Identidad Robusta: Implementar un sistema robusto de verificación de identidad como el KYC de Didit, que utiliza tecnología NFC y biometría facial, es crucial para mejorar la seguridad y la integridad de las transacciones financieras y la incorporación de clientes.

El lavado de dinero o blanqueo de capitales es el proceso por el cual los criminales intentan hacer pasar por legítimo un dinero cuyo origen es ilegal. Las políticas de AML (Anti-Money Laundering, por sus siglas en inglés), buscan poner cerco a esta práctica que trabaja habitualmente para lavar dinero que llega de actividades como el narcotráfico, la corrupción o terrorismo.

Un problema global con importantes consecuencias, puesto que afecta a la economía global, debilita el sistema financiero y alimenta al crimen organizado. De hecho, el Fondo Monetario Internacional (FMI) calcula que cada año se lavan entre 800.000 y 2 billones de dólares a nivel mundial, lo que puede equivaler a un 5% del PIB mundial.

Ante esta situación, las directivas AML buscan poner reducir y acabar con esta práctica ilegal, otorgando una mayor responsabilidad a las entidades reguladas para luchar contra estos delitos financieros. Para ello, es fundamental contar con un servicio de verificación de identidad (KYC) seguro, fiable y robusto.

¿Qué son las directivas AML?

Las normativas AML se encargan de proteger y mantener sano el sistema financiero. Estas directivas se encargan de hacer que las organizaciones financieras apliquen ciertas medidas para prevenir y detectar el blanqueo de capitales y notificar aquellas transacciones o actividades sospechosas a los organismos competentes.

¿Qué medidas tienen que implantar las instituciones para combatir el blanqueo de capitales?

Si las directivas AML se encargan de diseñar el marco regulatorio, las organizaciones son las que deben aplicar esta normativa para acabar con el blanqueo de capitales. Algunas de las medidas más habituales son los procesos de KYC o el seguimiento de transacciones, pero hay más.

  • Verificación de la identidad. El proceso por el cual la persona asegura su identidad ante la organización. Este paso es clave en la detección y prevención del lavado de dinero.
  • Monitorización de transacciones. La supervisión de transacciones permite la detección de actividades sospechosas.
  • Análisis de riesgos. El análisis del riesgo de los clientes también influye en este proceso.
  • Formación de empleados. La educación al equipo, tanto acerca de la normativa como de la monitorización, puede ayudar a reducir el fraude.
  • Auditorías internas. Los estudios dentro de la compañía pueden ayudar a optimizar procesos y mejorar aquellas áreas más débiles en relación con la prevención.

¿Quién dicta las normas de AML?

El Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), una organización intergubernamental con sede en París y que trabaja bajo el paraguas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), es la principal autoridad en la creación de normas para combatir el lavado de dinero y la financiación del terrorismo (CFT) a nivel global.

El GAFI establece 40 recomendaciones que los países miembros deben implementar en sus marcos legales y regulatorios. Estas recomendaciones abarcan una amplia gama de temas, como diligencia debida del cliente (CDD), informes de transacciones sospechosas (STR) o cuestiones de cooperación internacional.

Las normas del GAFI son ampliamente aceptadas como el estándar internacional para combatir este fraude financiero. Más de 180 países y jurisdicciones se han comprometido a implementar sus recomendaciones, lo que significa que las normas tienen un impacto significativo en la forma en que las instituciones financieras de todo el mundo operan y gestionan el riesgo de lavado de dinero.

A nivel nacional, cada país tiene la responsabilidad de implementar las recomendaciones en su propia legislación y prácticas. Esto significa que los marcos regulatorios específicos de AML pueden variar de un país a otro.

En España, por ejemplo, la responsabilidad principal de supervisar el cumplimiento de las normas de blanqueo de capitales recae en el Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (SEPBLAC). El SEPBLAC establece directrices y normas para las entidades obligadas, como bancos, instituciones financieras y empresas de servicios profesionales, y supervisa su cumplimiento.

En Estados Unidos, la Red de Represión de Delitos Financieros (FinCEN) es la principal agencia responsable de la lucha contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo. FinCEN emite regulaciones y orientaciones para las entidades financieras y supervisa su cumplimiento.

En el Reino Unido, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) es responsable de supervisar el cumplimiento de las normas de anti lavado de dinero por parte de las entidades financieras. La FCA tiene la facultad de imponer sanciones a las entidades que no cumplan con las normas.

Es importante tener en cuenta que estas normas contra el fraude financiero están en constante evolución. El GAFI revisa y actualiza regularmente sus recomendaciones para reflejar las nuevas amenazas y tendencias en el panorama global. Las instituciones financieras deben mantenerse al día con las últimas normas y regulaciones de AML para garantizar que están cumpliendo con sus obligaciones y protegiendo sus sistemas financieros del riesgo de delitos financieros.

Las fases del lavado de dinero

Habitualmente, el proceso de lavado de dinero pasa por tres etapas: colocación, estratificación e integración.

Etapa 1: Colocación

En esta etapa inicial, el objetivo es introducir el dinero en efectivo (o dicho vulgarmente, colocarlo) en el sistema financiero. Los ejemplos clásicos de colocación incluyen negocios en efectivo, transacciones inmobiliarias y juegos de azar. Otros métodos pueden ser el pago de deudas con efectivo o el cambio de divisas para convertir parte del dinero a otra moneda. Incluso, algunos lavadores simplemente transportan el efectivo a países con menor control financiero.

Etapa 2: Estratificación

La estratificación es el proceso de crear un rastro documental que oculte el origen delictivo de los fondos y proteja la identidad de los criminales. Las transferencias a través de múltiples cuentas o las conversiones repetidas de divisas son señales de alerta para reguladores y fuerzas del orden. Entidades como bancos y prestamistas tienen la obligación de realizar una debida diligencia para detectar este tipo de actividades.

Etapa 3: Integración

En la etapa final, el dinero lavado se reincorpora al circuito financiero legítimo y vuelve a manos del criminal o la organización. El proceso de estratificación dificulta la distinción entre fondos legales e ilegales. Los activos como bienes raíces, automóviles, obras de arte o joyas adquiridos en la etapa anterior pueden ahora ser utilizados o revendidos por los criminales. Otra técnica común es emitir facturas falsas a empresas fantasmas para recibir pagos por servicios o bienes inexistentes.

La diferencia entre el AML y el KYC

El proceso de KYC es un requisito habitual dentro de todas las regulaciones contra el blanqueo de capitales (AML). Mientras que el primero se centra en conocer e identificar a la persona, el segundo trata acerca de toda la normativa vinculada al dinero y su trazabilidad.

Un método de verificación de identidad sólido permite a las organizaciones tener una base confiable de personas alejado del fraude. Por eso es tan importante contar con soluciones de verificación y validación completas y robustas como las soluciones de Didit Business.

descubre cómo funciona nuestra tecnología para acabar con el fraude en primera persona

Cómo prevenir el lavado de dinero: el KYC de Didit

Didit ofrece el servicio de verificación de identidad más seguro del mercado, basado en tecnología NFC y biometría facial, lo que reduce al máximo cualquier intento de fraude de identidad, un problema que está creciendo exponencialmente en los últimos tiempos.

Mientras que el Near Field Communications (NFC) permite leer el chip y validar la información emitida por los órganos competentes, la biometría potenciada con Inteligencia Artificial se encarga de confirmar que quien busca superar el proceso de KYC es realmente quien dice ser. De esta forma, nuestra solución de verificación de identidad tiene una precisión del 99%.

habla-con-ventas.jpg

Share this post